Entrevistamos a María Capilla, Directora de Programa en el Colegio Salesiano María Auxiliadora de Mérida, quien nos cuenta su experiencia con el programa.
Comenzó a encargarse del Diploma Dual hace dos años, aunque ya conocía el programa desde cursos anteriores, lo que le permitió asumir la coordinación con una visión bastante clara de su funcionamiento.
¿Qué tipo de tareas lleva implícita esta responsabilidad para los que sois Directores de Programa?
Como Directora de Programa, mi labor implica supervisar el progreso académico y personal de los alumnos, hacer un seguimiento constante de su evolución y, sobre todo, acompañarlos durante sus inicios, que suelen ser los momentos más delicados. Los primeros meses pueden resultar un reto para ellos, ya que deben adaptarse a una metodología completamente distinta, con tareas 100% en inglés y con una dinámica más autónoma.
Además, gestiono la comunicación con el equipo de Academica Spain, resuelvo dudas técnicas o académicas, y sirvo de puente entre los alumnos, sus familias y el programa americano, garantizando que todo fluya de forma coordinada.
¿Qué cambios has ido notando en los alumnos inscritos en el programa a medida que han ido avanzando los años?
El cambio es, sinceramente, impresionante. A medida que avanzan los cursos, los alumnos muestran una evolución enorme tanto lingüística como personal. Se aprecia una mayor fluidez y naturalidad al expresarse en inglés, tanto oral como escrito, y una mejor comprensión auditiva y lectora.
Pero lo más destacable es la madurez intelectual que adquieren: aprenden a analizar temas de actualidad, a investigar por su cuenta y a formar su propia opinión con argumentos bien fundamentados. También se vuelven más organizados y autónomos, porque el programa les exige planificarse, cumplir plazos y asumir responsabilidades sin depender del profesor constantemente.
¿Qué ventajas crees que aporta estudiar un curricular de un país diferente al nuestro, como el estadounidense?
Creo que una de las grandes ventajas es poder descubrir y experimentar de primera mano cómo funciona el sistema educativo estadounidense, tan distinto al nuestro. El enfoque americano se basa en el aprendizaje por tareas (task-based learning), lo que significa que los alumnos no memorizan contenidos, sino que aprenden a comprenderlos, analizarlos y aplicarlos a situaciones reales.
Además, el hecho de trabajar con materiales auténticos y con profesores nativos les permite interiorizar el idioma de forma natural, como si estuvieran viviendo una experiencia de inmersión lingüística, pero sin salir del país. También fomenta habilidades muy valoradas en el futuro académico y profesional, como la creatividad, el pensamiento crítico y la resolución de problemas.
¿Crees que aprenden los alumnos realmente inglés? ¿Cómo dirías que es ese aprendizaje?
Sí, sin duda. El aprendizaje del inglés que se produce en el Diploma Dual es real, profundo y significativo. Los alumnos no aprenden solo vocabulario o gramática; viven el idioma. Desde los primeros meses se nota un salto cualitativo en su comprensión oral, en su capacidad de entender diferentes acentos y en su facilidad para expresarse con soltura y naturalidad.
Además, interiorizan estructuras complejas, idioms, phrasal verbs y expresiones cotidianas que difícilmente se adquieren en un contexto tradicional de aula.
El progreso es evidente en todos los niveles, y en muchos casos se traduce en una auténtica transformación en su manera de comunicarse en inglés.
¿Se nota ese nivel a la hora de cosechar buenos resultados en la Selectividad?
Por el momento solo hemos graduado a una alumna, pero su rendimiento posterior ha sido un claro reflejo del impacto del programa. En especial, se ha notado en su capacidad de redacción y comprensión escrita, que son fundamentales en la EBAU.
Aunque aún es pronto para generalizar, estoy convencida de que los alumnos del Diploma Dual parten con una ventaja importante cuando llega ese momento, ya que han desarrollado una base sólida de pensamiento crítico y de expresión escrita en inglés, lo que se traduce en mayor seguridad y competencia lingüística.
¿Recomendarías el Diploma Dual a aquellas familias y alumnos que puedan estar pensando en mejorar su inglés? ¿Por qué?
Definitivamente sí. Es una oportunidad única para aprender inglés en un contexto real y auténtico, con profesores nativos y una metodología viva y práctica. Es cierto que los primeros meses pueden ser duros, porque supone un cambio de ritmo y de exigencia, pero poco a poco los alumnos ganan confianza, fluidez, comprensión, entonación y capacidad expresiva.
Además, no solo mejoran el idioma, sino que aprenden a organizarse, a ser responsables y a gestionar su propio aprendizaje, habilidades que les servirán para toda la vida.
Por último, ¿cuál ha sido tu mayor satisfacción como Directora de Programa a lo largo de estos años?
Sin duda, mi mayor satisfacción ha sido ver la evolución personal de los alumnos: cómo pasan de la inseguridad inicial a creer en sí mismos y sentirse orgullosos de lo que son capaces de hacer.
También me emociona ver cómo aprenden a gestionarse solos, a ser autónomos y constantes, y cómo descubren el placer de aprender por sí mismos. Ver ese proceso de crecimiento y madurez, y saber que el programa ha contribuido a ello, es sin duda la recompensa más bonita de estos años como Directora de Programa.
